Antes fueron John Travolta, Mickey Rourke, Arnold Schwarzenegger o Sylvester Stallone –aunque estos también se han pasado con el bisturí-. Ahora Tom Cruise, que apareció en la gala de los BAFTA 2016 con la frente planchada y el rostro hinchado, y no precisamente por sobrepeso.

¿Qué se ha hecho el actor?

Según los expertos, el protagonista de "Top Gun" o "Misión Imposible" se ha pasado con el Botox en la frente y con el relleno de ácido hialurónico en los pómulos, para recuperar el volumen perdido. "Tom Cruise gustaba porque ejemplificaba la cara masculina por excelencia: rasgos muy marcados y pómulos planos. Pero, de repente, el exceso de ácido hialurónico que parece que le han infiltrado en el tercio medio de la cara –pómulos sobre todo- le ha cambiado todo el rostro por completo, dejando esos rasgos masculinos a un lado y obteniendo el efecto hinchazón del que se debe huir del todo", según la médico estético Mar Mira (Madrid, tel. 915 62 67 13). Además, "llama la atención que conserva las arrugas perioculares –patas de gallo-, pero han desaparecido completamente las de la frente y el entrecejo. Esto seguramente se deba a que estas zonas se han tratado con Botox", según el médico estético Favio Vieira (Barcelona, tel. 932 00 32 29). Y su tono de piel, más rojizo de lo normal, "o bien a unos rayos Uva antes del evento o bien a un peeling superficial que aún está haciendo su efecto y se encuentra en plena fase eritematosa", según el Dr. Vieira.

¿Desde cuándo se retocan los hombres?

Hace 10 años que la demanda de tratamientos médico estéticos por parte de los hombres está aumentando, según la médico estético María Rosa García Maroto (Madrid, tel. 915 638 464). "Aquellos que no desean someterse a una cirugía ven esta disciplina como una opción muy eficaz para pequeños retoques y corregir imperfecciones", asegura el cirujano plástico Jorge Planas (Madrid, tel. 915 78 46 76. Barcelona, tel. 932 03 28 12). "Por un lado vienen hombres maduros que ya se hacían tratamientos antes, y por otro lado chicos jóvenes que quieren empezar a cuidarse desde ya", apunta la Dra. García Maroto.

¿Qué es lo que más se hacen?

Cada vez más, como en el caso de las mujeres, se demandan retoques sutiles que no impliquen largos postoperatorios, asegura el Dr. Planas. Los más maduros suelen realizarse láser CO2 (desde 500 €) para rejuvenecer el rostro y "borrar" las secuelas y cicatrices del acné. Lo combinan con las infiltraciones de Botox (desde 300 €) para mejorar el entrecejo, las arrugas de la frente y la patas de gallo. Y en caso de pérdida de pelo recurren a las infiltraciones, en determinadas áreas del cuero cabelludo, de plasma rico en factores de crecimiento (desde 700 €), obtenidos a partir de una muestra de sangre del propio paciente. "La finalidad de dicho tratamiento es estimular, potenciar y acelerar la regeneración de los tejidos, en este caso, de los folículos pilosos, y frenar la caída del cabello", apunta el Dr. Planas. Sin embargo, "los más jóvenes vienen buscando prevención y el tratamiento que más se realizan son las infiltraciones con plasma rico en plaquetas en el rostro", apunta la Dra. García Maroto. También recurren a Nanofat (desde 950 €) que "consiste en la extracción, por micropunción, de una mínima parte de grasa del propio paciente, de dónde sobra –normalmente abdomen-. De esta grasa se extraen las células madre y se inyectan en las ojeras, consiguiendo así rellenar el surco de las ojeras, corregir las pequeñas arrugas y un tono de piel más claro y favorecedor", asegura el Dr. Planas.