"Y vamos a beber de esa copa, que no está tan rota" cantaban los Rodríguez. Hay relaciones que se acaban con la última botella compartida. Son vinos, que como los escenarios que han sido testigos de nuestras palabras y emociones, hacemos por evitar. Porque como la madalena de Proust, solo hace falta una molécula olfativa para que el pasado vuelva a sentirse presente. Porque cada vez que se acaba una botella, se llena de emociones.
Vinos que tenemos expresamente olvidados y que hacía demasiado añadas que no degustábamos. Y al catarlo ves como el vino ha evolucionado por las modas, la añada, las técnicas… Y que tu río interior del rollo Heráclito de captar sensaciones tampoco es el mismo.
Es lo que me ha pasado al re-catar Selección Especial, el primer vino de Abadia Retuerta. Este fresco 2020 es tiempo embotellado. Esta mítica bodega a orillas del río, ha sido vino de la Tierra de Castilla y León hasta tener su merecida denominación de origen protegida en 2022.
Abadía Retuerta Selección Especial Abadía Retuerta Selección Especial 2020
Abadía Retuerta Selección Especial Abadía Retuerta Selección Especial 2020
Un monasterio premostratense a las puertas de la Ribera del Duero con un hotel Le Domaine considerado uno de los mejores destinos de enoturismo del mundo. Hacen vinazos en general (adoro su Petit Verdot aunque pica más) pero voy a hablar de este en particular.
Para elaborarlo de esta manera artesanal se seleccionan y se mezclan los mejores vinos de cada añada. El otro toque de clase es que se vinifica por separado cada uno de los cincuenta y cuatro pagos con los que está clasificada la bodega. El corazón es de la variedad tempranillo y el resto de cabernet sauvignon, syrah y otras variedades que se adaptan genialmente a su terruño aportándole un toque internacional a la Tinta del País.
Atractiva nariz de grosella, frambruesa y mentolados que se despliegan en una boca aromática de taninos finos bien maduros.
Sus veinticuatro meses de roble francés son para uno de esos días que aún necesitas el abrazo de un chal (no en vano tiene 15 grados de alcohol) y de un buen tintorro por la noche… ¡porque sabes que le quedan cuatro días a tu cambio de armario! Marídalo con una de esas conversaciones que tienes pendientes y que te permitirán renacer en primavera.
"Pesa más la rabia que el veneno" canta Shakira y, a veces, nos cuesta el cambio de estación porque tenemos que desenvolver fantasmas en el vestidor en forma de falda manchada de tinto. Con la ropa como en los vinos, con el buen tiempo, nos apetecen más vinos blancos y rosados que se puedan servir a menor temperatura. No tengas miedo a la mudas y a las copas que significan cosas, cada añada los puedes volver a llenar de significado.
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