El hecho

  • 30 de enero de 2022. Rafael Nadal vuelve a batir otro récord; al conseguir el Open de Australia, alcanza su 21º Grand Slam.

Los medios

  • "Rafa Nadal gana el Open de Australia, único tenista que alcanza los 21 'Grand Slam'" (RTVE).
  • "Nadal gana más Grand Slams que nadie tras conquistar Australia: así se vivió este momento histórico en Carrusel" (Cadena SER).
  • "Nadal acaricia su 21.º Grand Slam, más que nadie en la historia" (La Vanguardia).

La realidad

  • Margaret Court: 24 títulos individuales en el palmarés; 19 en la categoría de dobles, y 21 en dobles mixtos. Nadie ha superado este récord.
  • Serena Williams ha ganado 23 Grand Slams y fue la primera tenista en alcanzar, en 2016, las 300 semanas consecutivas en el número 1 de la WTA. Por cierto, ganó el Open de Australia 2017 estando embarazada.
  • Steffi Graf ganó 22 títulos individuales de Grand Slam y uno de dobles, además de una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 1984. En 1999 recibió el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes.

Lo que algunos no quieren ver

En aquella ocasión, hubo medios que volvieron a invisibilizar el trabajo y el talento de las mujeres. No solo Court, Serena y Steffi han hecho historia en ese deporte. Nombres como Billie Jean King, Monica Seles, Martina Hingis, Arantxa Sánchez-Vicario... suma y sigue. Y hablemos de otras disciplinas deportivas: Blanca Fernández Ochoa, Queralt Castellet, Nadia Comaneci, Simone Biles... ¿Algo que decir?

Pero más allá del deporte, la mujer brilla, cada vez más y con más fuerza. Desde Amelia Earhart, la primera aviadora en cruzar el Atlántico, hasta Jane Goodall, la primatóloga que ha dedicado ¡60 años! de su vida a enseñarnos a todos que los chimpancés y los gorilas son nuestros hermanos. Desde Maruja Mallo, artista de una Generación del 27 que se sigue masculinizando en demasía, hasta Rosa Parks, que aquel día que no quiso ceder el asiento a un hombre blanco rompió un muro para debilitar el racismo.

Frida Kahlo, Simone de Beauvoir, Coco Chanel, Chloé Zhao, Gloria Steinem... ¿y todavía dicen que somos las nadie?

Somos las mujeres.