• A la catedral se le apoda 'la manquita' ya que le falta la torre sur: tuvieron que dejar de construir por falta de presupuesto en 1782 y así se ha quedado.
  • El símbolo de la ciudad es la 'farola', un precioso faro de color blanco del siglo XIX que luce inmejorable junto al Muelle 1.

A Málaga parece que la hubieran pasado por 'chapa y pintura' en los últimos años, transformándose de una ciudad de provincias que siempre quedaba en un segundo plano por la cercanía de la Costa del Sol a una localidad bella, cosmopolita y vibrante, que no cierra nunca su círculo artístico.

Desde la calle Larios al castillo de Gibralfaro, pasando por su fantástico teatro romano, su Alcazaba, su catedral, sus múltiples museos dedicados al arte (en todas sus etapas y facetas) o sus playas, Málaga enamora al visitante desde una perspectiva alegre y luminosa, heredera del paso de varias civilizaciones históricas cuya simiente se advierte, también, en su rica gastronomía.

Esta ruta nos invita a recorrer Málaga en dos días, tiempo que será sin duda insuficiente para hacernos una idea de todos los encantos de la ciudad. Pero, al menos, servirán para abrir boca ante todos los encantos... y rendirnos a sus pies.

preview for Diez lugares baratos a los que viajar este 2020

Sábado por la mañana

9:30 Nuestro recorrido empezará muy pronto en la calle más emblemática de la ciudad, la calle Larios, que fue inaugurada en 1891 gracias a la contribución económica de la familia del Marqués de Larios. Da gusto pasear por ella –desde 2003 es peatonal– y admirar su equilibrado conjunto arquitectónico y todos sus comercios, hasta que desemboca en la plaza de la Constitución, el eje de la vida malagueña desde la época de la Reconquista.

Los principales edificios de la ciudad se han ubicado en ella y de aquí parte la calle Compañía, en cuyo número 10, el Palacio de Villalón, nos encontramos nuestra primera parada, el museo Carmen Thyssen Málaga. Hay que detenerse a recorrer la impresionante colección de arte del siglo XIX español, 230 obras de autores como Sorolla, Casas, Iturrino, Zuloaga o Romero de Torres.

11:00 Volvemos sobre nuestros pasos hacia la plaza de la Constitución y tomamos la calle Santa María para conocer el magnífico conjunto catedralicio de la ciudad. De estilo renacentista, a la catedral se le apoda 'La manquita', porque le falta la torre sur ya que, en 1782, se les acabó el presupuesto y tuvieron que paralizar las obras. Anímate a visitar las cubiertas de la catedral, e incluso a hacerlo de noche, para disfrutar de las vistas de la ciudad desde 50 metros de alto.

Al salir, en la plaza del Obispo, puedes admirar el Palacio Episcopal (1762), conjunto de edificios que representan bien la arquitectura barroca malagueña. Damos la vuelta hacia la derecha a la catedral para tomar la calle Císter y llegar al Museo de Málaga, con la principal colección de arqueología (15.000 piezas) y bellas artes (2.000 obras, del siglo XV a la contemporaneidad) de la ciudad.

12:30 Tenemos ya hambre, pero vamos a hacer un últimos esfuerzo y vamos a visitar la Alcazaba, una preciosa fortaleza que comenzó a construirse en el siglo XI como palacio para los gobernantes musulmanes. En tu visita, podrás ver el contraste entre los espacios amplios salpicados de luces y sombras, los estanques, los jardines y, a la vez, ese potente sistema defensivo con torres albarranas, murallas almenadas o matacanas.

A la salida de la Alcazaba, hemos de echarle un vistazo al teatro romano, del siglo I antes de nuestra era, que permaneció en uso hasta el siglo III. Por esa zona tan céntrica, encontraremos muchos establecimientos para descubrir la gastronomía malagueña, de ingredientes de primera calidad llenos de sabor.

Las tapas son a cada cual más atractiva (dicen que no hay dos ensaladillas que sepan igual) y no hay que marcharse de Málaga sin probar sus pescaítos, sus boquerones y, claro está, el ajoblanco, los gazpachuelos y sus espetos, la forma tradicional de tomarse las sardinas, clavadas en una caña y puestas al fuego. Los pasteles y los vinos también son degustación obligada.

plaza General Torrijos y Alcazaba, Málaga, Andalucía, España
Marco Cristofori / robertharding//Getty Images
Plaza del General Torrijos con la Alcazaba al fondo.

15:00 Desde el teatro romano, tomamos la calle Alcazabilla, luego la calle Victoria y torcemos a la izquierda para llegar a la plaza de la Merced, que va a ser nuestro punto de partida para seguir los pasos de Picasso en la ciudad. En esta bonita plaza, presidida por el Monumento a Torrijos, nació y creció el pintor malagueño, concretamente en las Casas de Campo, en uno de los lados de la plaza.

Hoy es la Fundación Picasso-Museo Casa Natal recuerda los diez primeros años de la vida del pintor y cómo Málaga supuso una enorme influencia de su obra. Se exhiben recuerdos de la familia, fotos, postales de la época y también obras originales del autor.

16:00 Al salir de la fundación, tomaremos la calle Granada para llegar a la iglesia de Santiago, de finales del siglo XV, una de las más antiguas de la ciudad y lugar donde fue bautizado Picasso. Saliendo por Granada y continuando por San Agustín, a un minuto, llegamos al Museo Picasso Málaga, un palacio del siglo XVI que cuenta con una de las colecciones más importantes del pintor.

Son 233 obras que recorren todo su abanico pictórico, desde 1892 hasta 1972, y que ofrece una buena perspectiva de su arte rupturista. Sus temas preferidos son la familia, lo cotidiano, personajes cercanos y también la atracción por los desfavorecidos en lienzos como 'Madre y niño', 'Composición', 'Mujer con los brazos levantados' o 'Acróbata'.

17:00 Vamos algo justos de tiempo –si estamos en invierno, cierra a las 18 h; si es verano, a las 20 h– pero hay que intentar subir hasta Gibralfaro. Caminamos hacia la catedral y de ahí a la calle Larios para desembocar en el paso de la Marina; allí estará la parada del autobús 35 que nos llevará hasta esta otra preciosa fortaleza.

El castillo tenía como objetivo albergar a las tropas y proteger a la Alcazaba; se construyó en el siglo XIV y aún hoy sigue siendo uno de los monumentos más impresionantes de la ciudad, con sus magníficas vistas, sus murallas y sus torreones.

18:30 Las luces de la ciudad empiezan a emerger y es hora de coger el autobús de vuelta. O de caminar, unos 20 minutos de bajada, para conocer el Paseo de la Farola, así llamado por el precioso faro de 1817 que es todo un símbolo de Málaga. Allí, junto al muelle 1, se encuentra el Centre Pompidou Málaga, el precioso cubo de colores que es un centro de arte contemporáneo con obras de autores como Francis Bacon, Georg Baselitz, Constantin Brâncuși, Alexander Calder, Marc Chagall, Giorgio de Chirico, Tàpies o Picasso.

Centre Pompidou Málaga - El Cubo
leongoedhart//Getty Images
Centre Pompidou Málaga.

20:00 Estamos agotados de todo el día y podemos dirigirnos a las tiendas del Muelle 1 y llevarnos algún recuerdo de la ciudad y /o seguir por el muelle 2, un bulevar que recibe el nombre del Palmeral de las Sorpresas, por donde tomar algo para picar antes de volver a nuestro hotel y descansar.

Domingo

9:30 Esta ciudad es muy exigente si se quiere conocerla a fondo, por lo que te tendrás que acostar pronto y madrugar para seguir disfrutando de todos sus encantos. Hoy domingo empezamos pronto en el CAC (Centro de Arte Contemporáneo) Málaga, un precioso edificio que sirvió como Mercado de Mayoristas desde 1939 hasta 1983. Hoy alberga una buena colección de arte desde los años 50 hasta hoy, con artistas como Louise Bourgeois, Olafur Eliasson o Thomas Struth.

A tan solo tres minutos se encuentra el Museo de la Imaginación, una visita que encantará a los pequeños de la casa. Ilusionismo, trucos, juegos de luces y sombras... para fascinar a grandes y pequeños.

Playa de la Malagueta
Holger Leue//Getty Images
Playa de la Malagueta, una de la casi veintena de playas de la ciudad.

11:30 Nos acercamos al río Guadalmedina, que divide la ciudad, para pasear hacia el norte por el Pasillo de Santa Isabel hasta llegar al curioso Museo Unicaja de Artes y Tradiciones Populares. Se trata de un interesante espacio, ubicado en una posada del siglo XVII, que pone en valor todo el folklore local, con su colección de barros malagueños, cerámicas, textiles, forjas, artes de la imprenta, etc.

Después de la visita, vamos a volver a adentrarnos en el centro histórico de Málaga y seguimos el camino que nos trazan las calles Calderón de la Barca, Especería y Granada hasta llegar a Cárcer, donde nos encontraremos con otro de los edificios emblemáticos de la ciudad, el Teatro Cervantes (1870), sede cada año del Festival de Cine de Málaga.

13:00 Volvemos hacia el sur, en la dirección del mar, para acercarnos hasta la Ifergan Collection Ancient Art, una impresionante galería de obras arqueológicas desde la época mesopotámica hasta la llegada del Islam. La visita vale la pena pero es que, además, puedes comprar alguna de sus mejores piezas. En la manzana de detrás, yendo al sur, se halla el Mercado de Atarazanas, que fue antaño el astillero nazarí –del cual se conserva una de las puertas–.

Hemos hecho piernas y es el momento de descansar, reponer fuerzas y despedirse de la ciudad después del 'tute' que nos hemos llevado. Para ello, nada mejor que irnos a la playa; concretamente a una de sus más famosas, la de Pedregalejo, a la que accederemos tomando el bus 11 o 34 en el lateral sur de la Alameda Principal.

Resulta un bonito adiós a Málaga recorrer las calles del barrio de pescadores homónimo y sobrecogerse con el sonido del mar, con el ruido de los restaurantes especializados en pescados y mariscos, con la preciosa luz que lo ilumina todo. Es el lugar perfecto para ir pensando cuándo volver.