Nos preocupan los kilos de más, pero si miramos más allá del exceso de peso, vemos que es un conflicto con la relación que tenemos en sí con la comida. No somos un cuerpo, la cabeza es de donde parte todo. Por eso mismo hay que escucharnos y mirar qué conexión tiene lo emocional con los hábitos de alimentación tenemos. Sabemos, por ejemplo, que los TCA parten de un problema que reside en nuestra mente y que hay que abordarlo tanto psicológica como físicamente.

Para resolver por qué buscamos en Internet de manera desesperada dietas rápidas con las que perder el máximo peso posible, hemos contactado con Fran Sabal, nutricionista y coach autora de su libro 'Nutrición Emocional'. Ella es la persona adecuada para resolver todas nuestras dudas.

nutrición
Westend61//Getty Images

¿Por qué buscamos dietas rápidas constantemente?

Un origen que responde a la ansiedad

La profesional empieza diciendo que "muchas veces en nuestra vida no nos sentimos bien, pero tampoco lo suficientemente mal como para hacer cambios y, a veces, repentinamente, nos baja la ansiedad y queremos cambiarlo todo de manera rápida. Esto también nos sucede con nuestro cuerpo, ya que hay veces que vivimos años rechazándolo y sintiéndonos incómodas, pero realmente no practicamos nuevas rutinas de forma constante para poder ver cambios a corto, mediano y largo plazo.

Con mensajes desde el amor, nuestro cerebro se adapta mejor a todo

Hay veces que ya no aguantamos más y caemos en supuestas soluciones rápidas que nos van a devolver la satisfacción y la alegría con nuestro propio cuerpo, supuestamente de manera instantánea. Claramente, sabemos que esto no es así. Y es que cuando utilizamos mensajes desde el amor, somos capaces de conseguir nuestros objetivos, dado que con mensajes positivos nuestro cerebro se siente cómodo y no se pone limitaciones. En cambio, cuando nos hablamos desde la restricción, nos estamos poniendo una barrera que nos produce estrés, y nos hace estar en constante lucha con nosotros mismos, dificultando las posibilidades de lograr nuestra meta".

¿Qué debemos buscar, un método rápido o seguro ante todo?

El daño de las dietas exprés

"Generalmente las dietas rápidas no son seguras para nuestro cuerpo, ya que nos prometen grandes cambios, en muy pocos días. Cómo es posible que ese peso que hemos estado ganando durante años, nos queramos deshacer de él en cosa de días. Realmente esto no funciona así. Muchas veces es tanta nuestra obsesión por adelgazar, que nos da igual qué hacer con tal de conseguirlo, incluso somos capaces de poner en riesgo nuestra salud", apunta Fran.

La última frase desvela un punto muy importante a la hora de comprometerse en este tipo de dieta. Partimos de una ansiedad y frustración tan grande, después de haber pasado por varios procesos que no nos han funcionado que en vez de pararnos y pensar que la salud tanto física como mental está por encima de cualquier cosa. Que, para resultados duraderos, tendremos que aplicar algo que requiera una adaptación progresiva. Lo restrictivo y dificultoso será complicado de mantener en el tiempo y esto al final no nos interesa en ningún ámbito de nuestra vida.

Nutricionalmente, ¿cómo afecta a nuestro cuerpo una dieta rápida?

Los efectos colaterales

"Como comentaba anteriormente, estamos poniendo en juego nuestra salud ya que una falta de nutrientes afecta a todo nuestro metabolismo e incluso para compensar este déficit, podemos desarrollar ciertas condiciones como un hipotiroidismo, una resistencia a la insulina.

Además el creer en dietas rápidas que en el fondo sabemos que no son la solución, también termina aumentando nuestra sensación de frustración e incapacidad de lograr nuestros objetivos, ya que ponemos nuestra energía, nuestras ganas e ilusión en ella, pero luego no conseguimos los resultados que esperamos y volvemos a la sensación de nunca ser suficientes ni capaces de conseguir lo que queremos, lo cual no es cierto, es simplemente que no estamos haciéndolo de la forma más sana posible para nosotras", comenta la nutricionista.

Es aquí donde nos damos cuenta de que el esfuerzo físico o los supuestos cambios aparentemente físicos vienen de nuestra mente. Es más, la frustración que genera no conseguirlos va directa a nuestro cerebro, a lanzarnos mensajes negativos y esto nos repercute en nuestra autoestima.

¿Por qué desaconsejar una dieta rápida?

Opinión de nutricionista

"Desaconsejo totalmente las dietas rápidas y, además, desde el punto de vista de la nutrición emocional, creo que el peso es mucho más allá que una operación matemática de cuánto cómo y cuánto gasto. Si fuera tan sencillo no habría tanto sobre peso y obesidad en el mundo.

dietas rápidas
CreatiVegan.net//Getty Images

Creo que el peso es el reflejo de nuestra historia de vida, y de muchas áreas las cuales necesitamos detenernos a observa, trabajar y sanar, con lo cual, además de conseguir una alimentación saludable la cual es beneficiosa, no solo por mantener un peso, sino también para todo nuestro cuerpo y nuestros órganos, el darnos espacio para conocernos y sanar nuestras heridas del pasado y aprender a gestionar nuestra mente para disfrutar el momento presente y no estar con constante ansiedad pensando en qué pasara en el futuro, ni con nostalgia del pasado, es un gran regalo que nos podemos hacer para vivir en mayor plenitud tanto física como emocionalmente. En resumen, una dieta nunca va a ser la solución ya que no solo somos un cuerpo, somos seres integrales por lo cual es importante trabajar la nutrición desde el punto de vista físico, mental emocional y espiritual", dice Fran Sabal.

Por suerte, poco a poco vamos escuchando todas las partes que nos conforman como ser humano. No únicamente nos centramos en disociarnos como si pudiese hacerse. Es imposible hacer una dieta restrictiva pretendiendo que no nos afecte en el plano mental ni emocional.

Es una batalla perdida intentar trabajar una cosa sin mirar las demás. Así que ponte en marcha, escúchate y háblate desde el amor, que es la única manera de conseguir con éxito las cosas.

nutricion emocional fran sabalComprar
Fran Sabal