No hace falta ya que te contemos de qué va lo de la inteligencia artificial. Ni que ha venido para quedarse. Para despejarnos la cabeza cuando nos quedamos sin ideas, para abrirnos nuevas posibilidades… Preguntarle por destinos de vacaciones para tus próximos días libres no es lo único que puedes hacer. Tampoco intentar convencerle de que la humanidad en el fondo es buena y no hay por qué destruirla.

Puede ser también una buena herramienta para preparar menús, para conseguir recetas diferentes adecuadas a tu gusto… En uno de esos experimentos, me dio por preguntarle una tarde por algo particular: un menú específico. Falta de ideas para prepararme los tuppers, le pedí a Chat GPT que me diera una lluvia de ideas. Eso sí, le añadí unas especificaciones ad hoc para que me diera ideas concretas “para mí”. Le pedí que ese menú fuera de bajas calorías para ayudar un poco en la vuelta a la rutina después del verano y los excesos y que además me ayudase a ganar masa muscular, ya que volví a retomar mis entrenamientos. Que considerase, además, que fuera para una persona con tensión y niveles de glucosa bajos. Y esto es lo que me propuso para 3 días:

Día 1

Desayuno

- Omelette de claras de huevo con espinacas y tomates.

- Rebanada de pan integral.

Almuerzo

- Ensalada de pollo a la parrilla con verduras mixtas y aderezo de vinagreta ligera.

- Un puñado de nueces.

Cena

- Salmón al horno con brócoli al vapor.

- Ensalada verde con aguacate.

Snacks

- Yogur griego bajo en grasa con frutas frescas.

- Zanahorias baby con hummus.

Día 2

Desayuno

- Batido de proteínas con leche de almendras, espinacas, plátano y una cucharada de mantequilla de almendras.

Almuerzo

- Quinoa cocida con pechuga de pollo desmenuzada y vegetales asados.

Cena

- Tofu salteado con verduras en salsa de soja baja en sodio y jengibre.

- Coliflor al horno.

Snacks

- Palitos de apio con queso cottage.

- Puñado de almendras.

Día 3

Desayuno

- Avena cocida con frutas del bosque y semillas de chía.

Almuerzo

- Ensalada de atún con espinacas, garbanzos, tomates y aderezo de limón.

Cena

- Pavo molido salteado con pimientos, cebolla y espinacas.

- Brócoli al vapor.

Snacks

- Rodajas de manzana con mantequilla de almendras.

- Un huevo duro.

También me dio unas recomendaciones generales:

- Bebe suficiente agua durante todo el día para mantenerte hidratado.

- Divide tus comidas en porciones más pequeñas y come cada 3-4 horas para mantener el nivel de azúcar en sangre estable.

- Incluye fuentes de proteína magra en cada comida para favorecer el aumento de masa muscular.

- Opta por carbohidratos de bajo índice glucémico como granos enteros, verduras y frutas.

- Limita el consumo de azúcares refinados y alimentos procesados.

- Siempre ten en cuenta las señales de tu cuerpo y ajusta la dieta según tus necesidades y respuesta.

recomendaciones menú
Edwin Tan

Si tus cookies son como las mías y mientras navegas por cualquier sitio últimamente no paran de salirte promos de aplicaciones de entrenamiento y asesoramiento en nutrición, para un momento y piensa: ¿en qué se diferencian esas aplicaciones (en las que metes tu información personal y te da unas opciones de menú y entrenamiento), de lo que la inteligencia artificial hizo por mí aquella tarde? Efectivamente: en nada. Aunque yo sí tengo una diferencia: en que la segunda opción, es gratuita.

Todo parecen ventajas, ¿no? Pues lo cierto es que no. Después de la propuesta que me hizo la inteligencia artificial, quise contrastar con la opinión de un experto. De un profesional de la salud. Porque conviene recordar que este tipo de inteligencia NO ES UN PROFESIONAL DE LA SALUD. Y aunque las opciones que me dio no eran descabelladas y estaban bastante encaminadas, no tienen en cuenta lo más importante: el factor humano.

Cuando se busca un plan nutricional, hay que tener un objetivo que requiere de un seguimiento


Así me lo explicó Laura Parada, nutricionista de Slow Life House (Madrid): “la nutrición no es solo cálculos calóricos y de nutrientes, se debe tener en cuenta a la persona de forma global, teniendo en cuenta sus emociones.”

Le mandé todo lo que me propuso y esta es la opinión experta (que verdaderamente importa), al respecto:

“Se trata de un menú clásico para la pérdida de peso, bajo en hidratos. El problema es que se trata de un menú que no está personalizado. La dificultad que tiene seguir este tipo de planes es que, al no ser personalizado, no detalla las cantidades de las porciones, por lo que no es seguro que al final sea un plan bajo en calorías puesto que al no especificar porciones, si se come más de la cuenta, dejaría de serlo y no serviría para perder peso. Tampoco tiene en cuenta gustos personales, horarios, rutinas, historial dietético, peso previo, intolerancias, problemas gástricos, trastornos de la conducta alimentaria, si le gusta cocinar…”

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Natalia Gdovskaia

Para Parada, es necesario evaluar “cómo conseguir la adherencia al plan según la persona con diferentes estrategias”. Desde que la persona pueda lograr conciliar con algunas comidas que pueda considerar imprescindibles a sus gustos personales, alternativas, evaluar la comprensión del plan, llegar a un objetivo realista y saludable y también la contención durante el proceso. Cosas que, sorry, no hará Chat GPT por ti.

“Cuando se busca un plan nutricional hay que tener previamente un objetivo que requiere de un seguimiento global y un proceso, que conlleva contención y modificaciones a lo largo del mismo para poderlo llevar a cabo”, continúa la nutricionista.

Y si quieres recomendaciones generales avaladas por un profesional de la salud, estas fueron las que me dio Laura Parada (más allá de lo de beber agua):

  • Planifica las comidas semanalmente, creando tu lista de la compra en base a las comidas que has programado. De esta forma será más fácil comer saludable cuando hay poco tiempo, no tendrás que pensar en qué comer cada día. Muchas veces al no saber qué comer o no tener todos los ingredientes que se necesitan para cocinar, se termina optando por opciones de fast food o comidas monótonas, poco saludables y tirando de alimentos ultra procesados.
  • Aplica la crononutrición. La crononutrición consiste en respetar el ritmo natural de nuestro organismo e ingerir alimentos cuando el cuerpo se encuentra más preparado para asimilarlos. Los cambios en nuestro ciclo circadiano condicionan el efecto que producen los alimentos según la hora del día que se consuman. Hay estudios que demuestran la relación que hay entre el horario de las comidas y la predisposición a padecer ciertas enfermedades como diabetes, obesidad…

Algunas de las pautas de la crononutrición a aplicar son:

  • Al menos 12 horas de ayuno.
  • No comer al menos 2 a 3 horas antes de dormir.
  • Esperar al menos 30 minutos después de despertar para la primera ingesta del día
  • No hacer ejercicio al menos 2-3 horas antes de irse a dormir.
  • El horario en el que comemos tiene efecto directo en la secreción de hormonas relacionadas con el hambre, la saciedad, el sueño y en la tolerancia a la glucosa.

Cuando se trata de la salud, piensa que la inteligencia artificial no podrá nunca abordar tus problemas desde el factor humano que un profesional de la salud pueda, sin duda, tendrá siempre en cuenta.