¿A quién no le ha pasado alguna vez tener que tomar una decisión difícil y bloquearse por darle demasiadas vueltas a la cabeza? “Todos podemos caer en la parálisis por análisis cuando tenemos que hacer algo que nos da miedo, que podría traernos consecuencias indeseadas, o que puede afectar a otras personas”, dice Ainoa Espejo, grafóloga y coach de vida personal de Ai Hop Coaching. Pero, como dice esta experta, incluso podemos congelarnos ante situaciones cotidianas “si nos quedamos dando vueltas a las diferentes opciones que podríamos elegir, analizando nuestros sentimientos, las reacciones de los demás, tratando de leerles la mente, etc.

¿Lo peor? “En el fondo se trata de una forma de autosabotaje que nos aleja de conseguir los resultados que quisiéramos en nuestra vida”, dice Espejo. Y es que estos bucles pueden llegar a dañar nuestro autoconcepto, autoestima y seguridad personal, ya que, como explica la coach, “la imagen que se nos queda de nosotros mismos es que somos incapaces de tomar decisiones y avanzar”. “Estos círculos viciosos nos bajan la energía, haciéndonos sentir cada vez más pequeñitos, indefensos e impotentes”, añade. Por eso es tan importante ponerse en marcha y salir de esta espiral cuanto antes.

cómo salir delos bloqueos mentales
Photo by Rafa Elias//Getty Images

Observa y detecta

“Para evitar caer en el torbellino mental debes prestar atención y conocerte bien a ti misma”, dice Espejo. Hazte estas preguntas: ¿Te sucede cuando estás en un momento de mucho estrés, ante una decisión importante? ¿O caes continuamente en estas obsesiones, incluso con situaciones cotidianas? ¿Te pierdes a menudo en tu mente y se te pasa el tiempo sin darte cuenta?

Como explica la coach, normalmente sobreanalizamos la información porque creemos -erróneamente- que así tendremos controladas todas las variables posibles, y que evitaremos las consecuencias negativas (o sabremos adaptarnos mejor si suceden).

¿Cómo salir del bucle? Como dice Espejo, “debes ser consciente del proceso interno que seguramente estés viviendo: pensar una y otra vez en la situación que te provoca agobio, angustia. Le das mil vueltas, con lo que pierdes la perspectiva, te desorientas, te olvidas del objetivo final. Y con este aturullamiento por manejar tantos datos en la cabeza, no es raro que no sepas ya ni qué paso dar primero”.

¿La consecuencia? “Terminas paralizándote o procrastinando esas acciones que te llevarían a estar mejor”, dice la coach. “A veces lo haces vagueando, huyendo, dejando pasar el tiempo para no enfrentarte a eso que te da miedo… Incluso te distraes haciendo otras cosas que también son útiles y productivas, pero que no son las que debes hacer “, añade. Todo esto, por supuesto, provoca que te juzgues duramente, que te sientas culpable, te agobies y que vuelvas a la casilla de entrada, sobreanalizando y bloqueándote más aún cada vez.

cómo salir de los bloqueos mentales
Guido Mieth//Getty Images

Reconoce tu miedo

“Generalmente lo que hay detrás de este ciclón mental es el miedo (a equivocarte, a que te critiquen, a no ser capaz, miedo a perder oportunidades, a defraudar a los demás, a hacerles daño...)”, recalca Espejo. Como dice la coach, esta emoción es totalmente natural y necesaria para tu supervivencia, “se trata de una respuesta fisiológica a un estímulo amenazante que puede ponerte en peligro, te hace ser analítica, previsora y precavida, y en su punto justo te mantiene alerta para que tengas en cuenta los posibles riesgos y amenazas, para que ponderes sabiamente las desventajas y beneficios de tus decisiones”. Así que cuando el miedo te bloquea, lo que está pretendiendo es mantenerte a salvo en tu zona de confort, en lo conocido. ¡Al cerebro no le suele gustar la incertidumbre ni la falta de control!

Por eso, como dice la coach, “para gestionar tus emociones es tan importante que las hagas conscientes y te digas a ti misma que no estás en peligro de muerte, que ya estás al cargo de la situación y vas a hacer todo lo que esté en tu mano para que salga bien”.

cómo salir de los bloqueos mentales
Jamie Grill//Getty Images

Gestiona tu miedo

“El exceso de miedo actúa como una niebla espesa que te envuelve, limitando tu visión de conjunto del problema, desorientándote, dificultando que puedas avanzar con libertad y confianza”, dice Espejo. Con esta metáfora nos anima a hacer un sencillo ejercicio de PNL (Programación Neurolingüística). No necesitas nada más que tu imaginación y un ratito de calma. Puedes ponerte música relajante mientras lo haces:

“Visualízate rodeada de esa densa niebla. Siéntela, huélela, nota cómo humedece tu piel e impregna todo a tu alrededor, haciéndote sentir perdida, paralizada y asustada. Imagina ahora que tuvieras en la mano un aspirador con el que vas a ir succionando toda esa bruma paralizante. Vas notando cómo el humo desaparece lentamente, mientras le das las gracias, porque ya has comprendido para qué estaba ahí. Sabes que pretendía mantenerte a salvo, pero ahora has decidido tomar tú el control. Según se disipa la niebla vas notando cómo te envuelve la luz cálida del sol, haciéndote sentir mucho más optimista y confiada. Ahora ves perfectamente lo que te rodea, el paisaje que tienes delante tuyo y el camino que has decidido recorrer. Así que una vez hayas absorbido toda esa niebla de miedo, sacas el depósito de la aspiradora y lo compactas en una pastilla que te cabe en la mano. Notas lo ligera y suave que es. Te la guardas en el bolsillo, mientras continúas avanzando hacia tu meta. Ahora llevas contigo ese recordatorio -que no pesa ni paraliza- que te mantiene consciente de los factores importantes que debes tener en cuenta para decidir y actuar bien”.

Este sencillo ejercicio lo puedes hacer tantas veces como necesites, imaginándote vívidamente la escena.

cómo salir de los bucles mentales
Westend61//Getty Images

Trabaja tus excusas

A menudo el miedo no es tan evidente y resulta difícil detectarlo “porque se pone diferentes disfraces (excusas, pereza, dispersión, enfado, nerviosismo, procrastinación, agobio, victimización...)”, dice la coach. “El problema de las excusas es que a veces parecen motivos reales y coherentes para no ponerte en marcha. Por eso es tan importante detectarlas y analizarlas”, explica Espejo. “En ocasiones son razones reales y debes hacerles caso, pero casi siempre son justificaciones absurdas del miedo, que te mantienen anclada en tu bucle autodestructivo”, añade.

Así que es muy importante estar atenta, analizarlas y desactivarlas si crees que no son útiles. “Y, sobre todo, conocerte a ti misma para saber en qué momentos eres más vulnerable a creerte estas excusas, en qué situaciones eres menos consciente o tienes bajas las defensas y te dejas llevar por tu propia auto-saboteadora interna”, recalca la coach.

cómo salir de los bucles mentales
Sam Edwards//Getty Images

Autocoaching

A pesar de conocerte y seguir los consejos de la coach, los miedos seguirán apareciendo -aunque con menor intensidad-. “Pero recuerda que el mejor antídoto para el miedo es la confianza. Y la confianza se nutre de pruebas, de hechos demostrativos. Así que para poder confiar en ti, necesitas recordar momentos de tu vida en los que has sido fuerte, resiliente, paciente, en los que has sido capaz de tomar una buena decisión. Situaciones complicadas de las que has sabido salir adelante o adaptarte”.

Reconoce y valora tus fortalezas y habilidades, esta es la clave, así como valorar los progresos que vas haciendo, por pequeñitos que sean. “Cada paso que das es una demostración de que eres capaz. ¡Sublima tu miedo en energía de avance!”, dice Espejo.

Debemos darnos cuenta de que la vida se compone de pequeñas decisiones continuas, ¡así que sí eres capaz! ¿Un consejo exprés? “Procura empezar a tomar tus propias elecciones (sobre todo las cotidianas de bajo riesgo) de forma rápida, sin pensar mucho, conectando con tu intuición”, dice la coach.

Para esta experta es importante comprometerse con uno mismo, ponerse una fecha límite para empezar a actuar. “Haz hoy el mínimo paso que puedas dar -uno pequeñito nada más, que te saque del bucle y te ponga en marcha-. Baja de la mente al cuerpo, a la acción. ¡Haz cosas y valóratelas! Rebaja tus expectativas y exigencias, no te metas tanta presión. Hecho es mejor que perfecto. Siéntete dueña de tu vida, tú eres la jefa, la que manda en ti”.

Seguramente, como apunta Espejo, muchos de tus miedos provengan de la creencia de que no eres capaz de conseguir lo que te has propuesto. Así que ahí van algunas preguntas que puedes hacerte cuando te digas "no puedo":

● ¿Realmente no puedo, o es que no quiero?

● Al decirme que no soy capaz, ¿estoy siendo realista, humilde o cobarde?

● ¿En qué otros momentos parecidos sí he podido?

● ¿Qué fortalezas tengo para conseguirlo?

● ¿Qué evito pensando que no puedo?

● ¿Que dejo de ganar al no pasar a la acción?

● ¿Qué es lo peor que podría pasar?

● ¿Qué es lo mejor que puede pasar?

● ¿Qué es lo más factible que suceda?

● ¿Qué características, habilidades y fortalezas tengo para amortiguar las

consecuencias, adaptarme al cambio, o gestionar los resultados que se

den?

“Como ves -dice Espejo-, el autocoaching es un sistema muy útil para recapacitar y profundizar en tu interior, tomando la perspectiva necesaria para llevar tu vida hacia donde tú quieres. Pero en caso de que tu bloqueo sea demasiado grande, te animo a pedir ayuda profesional". ¡Mucho ánimo!