Si aprender de los mejores es una suerte, ver cómo interaccionan y comparten experiencias para crear algo nuevo es un verdadero privilegio. Y en los encuentros que estamos viviendo y que estamos narrándote gracias a #Inspira2 hemos descubierto numerosas y curiosas formas de alcanzar la inspiración y sacar lo mejor desde dentro.

¿Es acaso la imaginación una cualidad a veces infravalorada? Quizá sí. Sin embargo, es un aspecto esencial para una infinidad de trabajos. Entre ellos, la literatura y la cocina. Algunos chefs necesitan poner en marcha sus cabezas para dar con una combinación que cause sorpresa, que sea atrevida y que acabe con la sonrisa de un gran descubrimiento en quienes tienen la fortuna de saborear esa novedad.

manuel jabois y diego guerrero
Pablo Sarabia

¿Y a los escritores? ¿Les ocurre lo mismo? Definitivamente sí, pero desde otro prisma. Es un trabajo que se basa en cultivar la mirada como quien cultiva un huerto, y de contar y mostrar lo que surge en espacios desconocidos para hallar la frase, el personaje o la trama que nos enganche a sus páginas.

En este recorrido que nos regala KIA ya hemos disfrutado de las claves, trucos y, por supuesto, del talento de Iván Ferreiro, Najwa Nimri, Palomo Spain y Maribel Verdú. Esta vez le toca al gran chef Diego Guerrero. ¿Cuál es su objetivo? Encontrar los secretos de la narración. Cruzar el umbral de la literatura de la mano de Manuel Jabois para llevar su imaginación más allá.

manuel jabois y diego guerrero conversan sobre literatura
Pablo Sarabia

No puedes perderte a Manuel, casi como un detective de las letras, mostrándole el sendero del escritor a Guerrero. La sensibilidad queda al servicio de unos compañeros que se guían por sutilezas. Guerrero se enfrenta a la página en blanco, al vacío que atraviesa a cada escritor. Pero Jabois, que ya es un maestro de nuestras letras, va ayudarle a desfacer el entuerto.

"Darle una historia al menú"

Casi como un reverso proustiano, no va a ir a la magdalena para narrar su vida; va a ir a la vida para narrar la magdalena. Bueno, es más complicado. "Voy a contar mis platos". "Necesito contarlo como cuentas tú las columnas", le dice a Jabois. Ése es el reto.

preview for Por qué ha pedido ayuda Diego Guerrero a Manuel Jabois

"¿Cómo cuento esto?". Esa es la preocupación de Guerrero, porque narrar la cocina es algo que no conocíamos y vamos a descubrir. "En la literatura contamos lo que no vemos y lo que no vivimos". El comienzo, según Jabois, es "una historia que ensamble todos los factores".

Para eso, el deambular por las calles es fundamental. Como el buen detective, el escritor observa sin ser observado. Aunque parezcan "Starsky y Hutch", una buena prueba es imaginar qué plato le cocinaría Diego a un desconocido. "¿Qué le darías a ese hombre? ¿Qué vegetal sería ese chico", le pregunta Jabois para desatar un poco la imaginación de Diego. Y parece que con éxito.

diego guerrero habla con manuel jabois
Pablo Sarabia

"Manu, no consigo ver más que el plato", le confiesa Diego a Manuel. Pero buscando a fondo descubren un "arranque": el viaje que nace de "una verdad tuya", le indica Jabois para buscar ese proceso de creación.

diego guerrero prepara un plato
Pablo Sarabia
"Acabas de empezar una pequeña historia"

"Empieza a imaginarte cosas", le aconseja Manuel. Diego toma el consejo y consigue "el primer chispazo". Éste es el inicio de lo que descubre Diego Guerrero como su proceso creativo de llevar la cocina a las letras. No son unas gambas al pipil, es una experiencia renovada la que va a contar Diego.

Cuando da con la tecla, Diego ha descubierto que "si no lo hubiera llamado no habría sido posible". Y añade: "Ha sido inspirador y nos abre un camino nuevo para el futuro", nos dice este chef que está explorando lo desconocido para transformarlo en sabor, en experiencia.

platos y bloc de notas de diego guerrero
Pablo Sarabia

¿Cómo lo ha conseguido? Viajando al interior de sí mismo, a la vivencia que lo llevó a una sinestesia. Se ha preguntado: "¿A qué sabe la pizarra?". ¿Cómo se mezclan las texturas que nos llegan a los ojos y al paladar?

La narración de la vida era la clave del éxito de Jabois, y eso es lo que le ha transmitido a Diego para conseguir que sus recetas no sólo impacten en los ojos y en el paladar, sino en una narración que nos dé algo más de la historia de un plato único.

diego guerrero con cuchillos en la cocina
Pablo Sarabia
"No me veía capaz"

"Está increíble, de verdad. No era un plato fácil para contar", afirma Jabois. Diego responde: "Millones de gracias. Esto cambia todo. A partir de ahora creo que voy a hacer los platos así". Además, como agradecimiento le ofrece algo que a todos nos pondría los dientes largos, cocinar.

jabois y guerrero comen juntos
Pablo Sarabia
"Me ha inspirado"

Que la gastronomía era un fenómeno estético no era algo de lo que se pudiera dudar. Ahí ha estado Manuel para aportar algo a lo que no estábamos acostumbrados, ver la belleza narrativa que hay en la cocina. Y Diego Guerrero ha demostrado que hay mucha. Que cada plato puede tener una historia personal y un escarceo con la belleza en los lugares más inesperados. Quizá como la magdalena del escritor francés, con un momento, sólo con un detalle, se justifica toda una historia.

diego guerrero en un kia
Pablo Sarabia

El camino de estos dos narradores de tan, a priori, lejanos territorios se ha convertido en una tarea difícil, la de hallar la inspiración con lo cotidiano y, de ahí, llegar a la universalidad de un relato, el de los sabores. ¿Quién no va a querer redescubrir la cocina con una belleza tan enhebrada en los detalles? ¡Que aproveche!

Vía: Esquire ES