Fotos: Fernando Roi; Ayudante de fotografía: Sara Guillén; Realización: Sylvia Montoliu y Bárbara Garralda; Maquillaje: Miguel Ángel Álvarez para Yves Saint Laurent Beauty Pelo: Miguel Ángel Álvarez para GHD; Vídeo: Luis Cárcamo, Diego Rueda
No siempre fue la gurú que hoy conocemos. El yoga entró en su vida, como ella dice, por casualidad. Fue durante su estancia en Nueva York cuando hizo su primer acercamiento, como hobby, tras las jornadas de trabajo. Porque por aquel entonces, Xuan Lan trabajaba en el sector financiero (marketing y banca). Tenía un trabajo de oficina, con un día a día inflexible que no hacía fluir su espiritualidad.
Así que esta parisina (que no te despisten sus rasgos asiáticos, porque es de París -aunque su país de origen es Vietnam-) decidió profundizar en la disciplina que, sin duda, le cambiaría la vida.
Desarrolló su pasión y dio rienda suelta a la que demostró ser su vocación en Barcelona. Se inició en el Ashtanga Yoga y lo practicó durante más de 10 años pero su práctica evolucionó con ella hacia un yoga más dinámico, formándose en Vinyasa, Jivamukti, Dharma yoga o Yoga para trauma. Y ya ha escrito sus propios libros, como Yoga para mi bienestar, en el que reflexiona e invita a introducir la práctica en tu vida a través de su experiencia.
Grijalbo Yoga para mi bienestar (edición actualizada): Rutinas de alimentación, meditación y yoga (Bienestar, salud y vida sana)
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El yoga cambió su vida, sin lugar a dudas. Es rotunda cuando lo afirma. Y así lo expresa en cada uno de sus libros. Lo transmite como si hubiera sido una iluminación, como si un camino en aquellos días de oficina, se hubiera abierto en forma de asanas. Y no se arrepiente.
Ahora, su objetivo es cambiar la vida de todos los que siguen sus prácticas y de todo el que quiere iniciarse en el armónico mundo del yoga, hacer que llegue al mayor número de personas. Infundir amor y armonía en cada uno y en todos.
Sus maestros
Todo maestro, tuvo un maestro. Y tal y como nos cuenta, ella tuvo muchos maestros para desarrollar su práctica, comenzando con maestros de Ashtanga Yoga como el reputado John Scott o David Swenson.
Con su propia evolución y el cambio en su estilo, comenzó a seguir también las enseñanzas de otro gran gurú de la disciplina, como Sri Dharma Mittra. Eso sí, confiesa que últimamente, sus maestros (porque sigue en constante evolución), son más espirituales.
Nos menciona dos grandes nombres: el doctor en biología molecular, monje budista francés y asesor personal del Dalai Lama, Matthieu Riccard, del que, por cierto, desde hace años los científicos de la Universidad de Wisconsin estudian su cerebro y lo consideran como “el hombre más feliz del mundo” y el recién fallecido Thích Nhat Hanh, un referente del mundo del mindfulness.
En cada una de sus palabras, Xuan Lan transmite una y otra vez esa mente abierta. Su sonrisa desvela un equilibrio interior fascinante. Y es que, como Ganhdi dijo una vez: “la felicidad aparece cuando lo que piensas, lo que dices y lo que haces, están en armonía”. Y Xuan Lan baila delicadamente en esa fina línea como una equilibrista de la vida, gracias al yoga.
En el vídeo, Xuan Lan lleva blusa rosa de Marella, pantalón blanco de Antik Batik, sujetador de TCN, colgante de oro de Ginette NYC y anillos de Canyon Bijoux.
