No solo de succionadores de clítoris vive el hombre, o la mujer en este caso. La gran revolución de Satisfyer fue convertir la masturbación femenina en tema de conversación habitual. Lo que antes era un tabú, algo de lo que ni tan siquiera se hacían chistes en la televisión al contrario de lo que sí pasaba continuamente con la masturbación masculina, se puso encima de la mesa con toda la naturalidad de mundo. “Seguramente ayudó que los succionadores de clítoris no tuvieran apariencia de juguete erótico ni imitaran la apariencia de un falo, forma habitual en los vibradores pensados para la penetración”, dice Sara Martínez, experta en comunicación de EroticFeel. “No obstante -añade-, y ahora que los succionadores han abierto el camino, ¿por qué quedarnos ahí? Existen otros muchos juguetes y accesorios que, además, pueden resultar mucho más excitantes que el alabado succionador de clítoris (sin quitarle méritos, ojo)”, añade.

Como dice esta experta, “basta echar un vistazo a las encuestas sobre fantasías sexuales realizadas año a año por sexólogos y reconocidas marcas de preservativos para darse cuenta de que el ‘teledidonic’ ha escalado puestos hasta colocarse entre una de las cinco primeras”. ¿Y eso qué es? Pues para los que aún no lo sepan se trata de tener sexo con juguetes sexuales que funcionen por control remoto. Y aquí, como apunta Martínez, ganan por goleada las llamadas ‘bragas vibradoras’: “Diseñadas para ser utilizadas en público, discretas, cómodas y fáciles de utilizar, desmienten eso tan manido de que los juguetes sexuales son para utilizar en solitario”. Aunque evidentemente las puedes utilizar a solas, en casa o en la calle, aquí el morbo está en ceder el control y no saber cuándo ni cómo va a estimularte tu pareja, en contener las muecas de placer y no dejar que la cadencia de tu voz indique lo bien que te lo estás pasando.

bragas vibradoras
EroticFeel
bragas vibradoras
EroticFeel

Qué son y cómo funcionan

Lo primero es tener claro qué son exactamente las bragas vibradoras y cómo funcionan. “Para empezar, no se trata de unas bragas con motor incorporado, es más bien un vibrador externo que, colocado en la ropa interior, estimulará el clítoris y los labios vaginales”, explica la experta de Eroticfeel. Aunque, como añade, “algunos modelos, como el Liebe Panty Vibe, incluyen unas braguitas ajustables con un bolsillo en el que encajar el vibrador; otros, en cambio, son modelos a los que se ha dotado de una pieza imantada para que se sujeten a cualquier braguita sin moverse”. Este es el caso, por ejemplo, del Satisfyer Sexy Secret, el Lovense Ferri, o el We-Vibe Moxie. Y sí, podrás caminar, correr o hacer lo que te dé la gana porque el imán sujetará el vibrador a tu ropa de tal manera que no se caerá ni se desplazará hasta que tú misma lo retires.

En segundo lugar, como aclara Martínez, lo que sí tienen en común todas las bragas vibradoras o estimuladores para braguitas es que pueden controlarse a distancia, bien a través de un mando (sí, sí, como el de la tele), bien mediante bluetooth o una aplicación descargada en el teléfono móvil. “La principal diferencia entre un método y otro es que el mando y el bluetooth solo funcionan en distancian cortas, es decir, tú y la persona que lo esté controlando tendréis que estar, como mucho, a un par de metros de distancia, mientras que con la aplicación no hay kilómetros que valgan, se podría rodar la versión adulta de tú a Londres y yo a California”.

bragas vibradoras
EroticFeel

Aclaremos algunos puntos básicos

Como deja bien claro la experta de EroticFeel, “los vibradores para braguitas no son insertables”. “Dotados de un motor y fijados a tu ropa interior, te estimularán externamente con distintos patrones e intensidades de vibración”, añade. ¿Se parecen en algo al Satisfyer? “Bueno, si nos referimos al succionador de clítoris, sí. En este caso no lo estimularán con ondas de aire pero lo harán con vibraciones que van desde el cosquilleo más suave hasta los más salvajes pulsos”, explica Martínez. Todo es cuestión de gustos…

Como continúa la experta de EroticFeel, “los estimuladores externos que se pueden controlar con mando a distancia no son algo tan novedoso, lo verdaderamente innovador es la aplicación (cada marca de juguetes tiene la suya, siempre gratuita) que permite controlar el juguete desde el móvil y a cualquier distancia, lo que abre nuevas posibilidades de placer, tanto para cumplir fantasías que antes eran imposibles como para salir de la rutina e incrementar la confianza y la complicidad en la pareja”.

¿Y si a mí no me valen? “Si te estás preguntando esto aclaramos de nuevo que estos juguetes se ajustan a cualquier talla de ropa interior gracias a su pieza imantada”, aclara Martínez. “En el caso de que el vibrador en cuestión incluya una braguita con bolsillo para encajar el juguete, estas prendas son siempre ajustables. Así que no, no hay excusas, el placer está ahí esperándote y no entiende de tallas”, recalca.

¿Se pueden lavar? “Por supuesto, ¡solo faltaba! Tanto las bragas, que deberás lavar como cualquier otra prenda de ropa interior, como el juguete, que debes higienizar siempre después de cada uso con agua tibia y jabón neutro o con un desinfectante específico para juguetes sexuales”, subraya Martínez.

Recomendaciones de uso

Como dice la experta de EroticFeel, es recomendable que te asegures de que la batería está cargada antes de lanzarte a la calle a disfrutar (este tipo de juguetes suele tener una autonomía de 60 minutos). “Además, ya seas tú o tu pareja la que vaya a controlar la estimulación, descárgate la aplicación primero en el móvil e invita luego a quien quieras a participar en tus juegos”, dice la experta. “Que no te asuste tanta tecnología, estas apps son completamente intuitivas, a prueba del más torpe, vaya”, añade.

Por último, y antes de colocar el juguete, Martínez recomienda aplicarte un poco de lubricante de base de agua, pero “no te pases con la cantidad, únicamente lo justo para que la estimulación sea aún más placentera”, puntualiza.