La Inteligencia Artificial ha entrado como un tsunami en nuestras vidas. Y va a cambiar muchos aspectos en el ámbito laboral. Es inevitable que aquellos empleos más repetitivos y rutinarios se automaticen por la IA. En esos casos, desaparecerán algunos trabajos, las tareas más monótonas. Pero también se crearán nuevos empleos, profesiones que requieren habilidades humanas especiales como la creatividad, la empatía o el compañerismo.

Según una encuesta del Institute Business of Ethics, el 59% de la población española teme que su trabajo acabe siendo sustituido por esta tecnología. Existe el miedo sobre lo que va a suceder en el futuro y qué clase de convivencia se generará entre ambos mundos. Hemos visto demasiadas películas de ciencia ficción donde los robots se apoderan del mundo… Pero también está el lado positivo. Por ejemplo, el Foro Económico Mundial considera que la tecnología creará 97 millones de nuevos empleos para 2025, 12 millones más de los que destruirá. ¿Y cuáles son esos empleos innovadores que se van a generar gracias a la Inteligencia Artificial?

Nuevas profesiones

Ingeniero de machine learning. Son aquellos profesionales que diseñan algoritmos y sacan conclusiones a partir de los datos. Es un perfil técnico que requiere de una formación universitaria como matemáticas o ingeniería informática.

Otra profesión que surge de la Inteligencia Artificial es entrenador de robots. Porque esos aparatos no nacen aprendidos... necesitan un humano que les enseñe y que vayan generando conocimientos poco a poco, como en una cadena de montaje.

La ciberseguridad es otro mundo por explorar. Son necesarias profesiones que puedan solucionar un ciberataque, que velen por nuestros datos bancarios, para que por ejemplo no queden al descubierto y se produzcan robos a gran escala pero también que establezcan protocolos y controles preventivos para que no suceda lo peor.

Nacen también los profesores de Inteligencia Artificial o desarrolladores de modelos de lenguaje. Son aquellos tutores que ayudan a entender y aprender el lenguaje específico de un campo, como las finanzas, para que la IA pueda realizar tareas especializadas, como ayudar a las personas a entender los informes financieros de una empresa o a navegar por el proceso de solicitud de un préstamo.

Casi todos los nombres tienen una terminología anglosajona, como el reskiller, o formador de habilidades, que permite formar a un empleado para adaptarlo a un nuevo puesto en la empresa, ayuda a los profesionales a cambiar de función o sector laboral para acceder a nuevos puestos de trabajo que van surgiendo con las nuevas tecnologías. Debe tener unas habilidades específicas porque permite a los empleados adaptarse a nuevas oportunidades, reciclarse ante los nuevos desafíos de la tecnología.

También 'de letras'

Pero no todo son profesiones que requieren conocimientos específicos de ciencias. También hay empleos denominados de letras, como por ejemplo el especialista en ética y leyes con conocimiento de Inteligencia Artificial. Una especie de abogado del futuro con conocimientos de derecho y ética sobre Inteligencia Artificial. Porque las leyes también se tendrán que amoldar a esta nueva realidad.

Y también hablamos de arquitectos, pero no es el concepto clásico que tenemos en mente, aquellos que crean edificios, sino que son arquitectos que construyen el cerebro de la inteligencia artificial. Su trabajo consiste en desarrollar el código que les da vida, son programadores de sus cerebros.

Y otro extraño nombre con el que debemos familiarizarnos: los expertos en UX, creadores de interfaces intuitivas, diseñan experiencias para los usuarios de la Inteligencia Artificial. Con habilidades analíticas y trabajo en equipo. Profesiones que poco a poco se integrarán en el mercado laboral a medida que avance la tecnología.