El agua con limón no es solo una bebida servida en los balnearios o al salir del spa. Mucha gente tiene el hábito de tomar zumo de limón recién exprimido por las mañanas para ayudarles a despertarse, para purificar el organismo, o también para combatir un resfriado. Pero además es útil para tu piel, especialmente para prevenir la aparición prematura de líneas de expresión y arrugas.

El zumo de limón estimula la producción de colágeno

El limón contiene Vitamina C, que ayuda a estimular la producción de colágeno. En 2007, investigadores llevaron a cabo un estudio con mujeres de mediana edad para determinar lo beneficiosa que es la Vitamina C como remedio antienvejecimiento. Descubrieron que las mujeres que tenían una dieta rica en Vitamina C, y baja en grasa, tenían menos arrugas y mejor aspecto de la piel en general.

El zumo de limón combate los radicales libres

Los radicales libres pueden encontrarse en casi cualquier sitio, pero están presentes sobre todo en lugares donde la contaminación es alta, como en las grandes ciudades. Si consideramos el hecho de que el 80% de los signos de la edad proceden de tu estilo de vida (que incluye dónde vives), es importante encontrar la manera de neutralizar el daño de los radicales libres. Una de las mejores formas de combatirlos es comer alimentos ricos en antioxidantes. La Vitamina C de los limones es un gran antioxidante, e incluso ayuda a estimular la producción de glutatión, un antioxidante que produce tu cuerpo de forma natural.

El zumo de limón y su función detox

Tener un cutis sano, radiante y joven se consigue comiendo de forma saludable (clean eating) y ayudando a tu cuerpo a eliminar toxinas. El zumo de limón limpia el hígado, y es un diurético natural, lo cual ayuda a tu organismo a eliminar las toxinas más rápido de modo que tu piel se regenera y luce más bella.

Beber agua con limón cada día es beneficioso para tu piel. ¿Nuestra mejor manera de disfrutarlo? Exprime medio limón en un vaso de agua caliente, añade una cucharada de sirope de arce para darle un sabor más dulce, e incorpora una pizca de alguna especia curativa, como la canela. Si no eres muy fan del agua con limón, también puedes incorporar el cítrico en tu dieta: ralla un poco de su cáscara en la vinagreta casera para tus ensaladas, exprime una rodaja de limón en el salmón o en la sopa, o añade un poco de zumo de limón en un smoothie.