Manchas, sequedad, granitos, falta de vitalidad… tu piel no se libra de alguno de estos problemas (o de todos) cuando termina el verano. Y es que las horas interminables bajo el sol, los aires acondicionados o los cambios horarios y alimenticios hacen mella en nuestro cutis y en nuestro cuerpo. ¿Cómo hacer frente a estas imperfecciones y no morir en el intento? Muy sencillo. Coge papel y boli y apunta estos consejos para lucir un cutis de 10.

Renueva la piel de tu rostro

Uno de los grandes damnificados después de las largas jornadas de verano es nuestro rostro. Por eso, la exfoliación debe ser un 'must' en tu rutina de belleza postvacacional. Al limpiar el cutis, lograremos eliminar células muertas, impurezas y rugosidades de la piel para dejarla limpia y suave. Además, gracias a la exfoliación, se repara el daño que el sol ha podido ocasionar, como las manchas, y se estimula la producción de colágeno para evitar la formación de arrugas.

Hidrata tu cuerpo

No nos cansaremos de decirlo. La hidratación es uno de los 'beauty tips' más importantes que hay si quieres tener una piel joven, brillante y reluciente. Tras maratonianas jornadas de sol nuestra piel está reseca, deshidratada y repleta de rojeces. Así que echa mano de tu mejor crema hidratante y aplícatela, al menos, una vez al día. Si estás en busca de una, te recomendamos Aquasource Gel de Biotherm, que dejará tu piel intensamente hidratada hasta 48 horas después de su aplicación.

Human leg, Leg, Skin, Joint, Thigh, Beauty, Foot, Calf, Toe, Sitting, pinterest

Repara tu pelo

¿Notas que tu pelo está áspero y sin brillo? ¿Presenta un color amarillento? Las horas de sol, el cloro de la piscina, la sal del mar… son letales para tu cabello. Y aunque lo hayas cuidado e hidratado durante los meses de verano seguro que no presenta la misma vitalidad. Ahora es momento de que tu pelo recupere su color, si lo tienes teñido, y su fuerza. ¿Cómo? Intenta evitar secadores, planchas o stylers ya que suelen resecar el cabello, utiliza aceite o serum para la hidratación y acude a tu peluquería habitual para sanear las puntas. Ah, cuando te duches, acaba el lavado con agua bien fría para que tu pelo brille aún más.

No olvides manos y pies

Los tacones o las sandalias demasiado planas seguro que te han creado rozaduras en los pies, ¿verdad? Con la llegada de septiembre es momento de decir adiós a este tipo de calzado y apostar por uno que transpire y, sobre todo, mucho más cómodo (al menos, hasta el próximo evento). De esta forma, evitarás rozaduras, ampollas, sequedades e, incluso, la aparición de los molestos callos.

Por supuesto, tampoco pierdas de vista a tus manos. Las uñas suelen estar resentidas debido a la gran cantidad de laca y quitaesmaltes que solemos utilizar, por lo que es necesario limpiarlas en profundidad y darles un respiro durante unos días hidratándolas con aceites específicos.

Skin, Beauty, Hand, Arm, Chin, Joint, Shoulder, Nail, Close-up, Neck, pinterest

Sigue usando protector solar

¿A qué has oído que los rayos de sol también penetran cuando el día está nublado? Pues esto no es solo en verano, también en el resto de estaciones. No se trata de que te embadurnes de crema en pleno noviembre pero sí que te protejas del sol hasta que finalice el otoño. Tu piel estará más protegida e hidratada durante más tiempo, evitando la aparición de manchas y que ésta se descame dando lugar a la temida piel de lagarto.

Cuida la dieta

No solo los productos externos pueden cuidar tu piel, también lo hace la alimentación. Una dieta rica en verduras y frutas frescas, que tienen vitamina C y antioxidantes, y en ácidos grasos, como el aceite de oliva, que contienen vitamina E, será esencial para que la piel se libre de las impurezas y brille como nunca. Además, alimentos como el salmón, el arroz integral o el chocolate negro (sí, chocolate) oxigenan la piel y mejoran su textura. ¡Tampoco te olvides de beber entre 6 y 8 vasos de agua al día para mantenerte hidratada!