David Otero dejó El Canto del Loco, una banda que revolucionó nuestro panorama musical, antes de morir de éxito junto a su primo Dani Martín. El Pescao triunfó con su primer trabajo en solitario y ahora ha decidido romper la baraja para acercarse más si cabe a su público en una aventura discográfica que se inició en Buenos Aires y se ha fraguado en su ciudad, Madrid.

Azul y Blanco es el primer single de su último trabajo, Ultramar. ¿Trae ritmos veraniegos para animar el otoño?
La intención es que sea atemporal, aunque sirve para alargar el verano. 

En esta producción ha utilizado un sistema participativo con sus seguidores. ¿Ha aumentado el número de fans?
No lo sé, porque no está enfocado para conseguirlos. Se han realizado una serie de acciones sin estrategia dirigidas hacia la gente que lleva apoyándonos un montón de tiempo. Hemos colgado las maquetas para que seleccionaran la última canción. La elegida fue Azul y Blanco, así han visto que su opinión cuenta y pesa.

¿Cuál fue la mejor etapa del proyecto? 
El viaje a Londres con dos seguidores, que surgieron tras un concurso. Quedamos en el aeropuerto, desayunamos juntos, nos mezclamos en los asientos del avión, fuimos en tren desde Gatwick hasta la capital. Fue un fin de semana entre amigos. También estuvimos en el estudio de grabación con el productor y vimos los discos de platino ganados por artistas enormes, como Adele. Por la tarde, cogimos un autobús para cruzar al otro lado del Támesis. Nos llevamos unas guitarras y un cajón e improvisamos en la calle. Fue genial.

Con la grabación ha pasado más de un mes viviendo en Londres. ¿Nos descubre una buena dirección para cenar?
El estudio se encontraba en el distrito noroeste de St. John’s Wood, muy cerca de Regent’s Park, donde me gustaba ir a correr. En esta zona me he movido mucho por la que llaman High Street, que es como nuestra Gran Vía madrileña. Me encantaba ir a cenar a The New Inn, un restaurante que integra un hotel y un pub. 

Considera Buenos Aires su segunda casa, ¿qué lugares le enamoran?
A mis amigos les digo siempre que intenten no reservar un hotel en el centro histórico, porque está muy mezclado con la zona financiera y, aunque hay teatros y museos, por la noche no tiene tanto encanto como otros lugares. Mi recomendación es que se alojen en Palermo Soho o Palermo Hollywood. Me considero palermitano, he vivido en dos ocasiones en este área. Una en Cañitas, que es perfecta para ira a cenar en plan tranquilo o familiar y tiene restaurantes con mucho ambiente. En otra ocasión elegí la zona donde viven muchas celebreties. 

Es un gran futbolero, ¿ha conocido los estadios del Boca o del River?
Los dos. Tanto cuando fui a La Bombonera, donde juega el Boca  Juniors, como cuando acudí al complejo bonaerense del River Plate vi una gran masa de gente empujando y cantando. Me pareció un poco agobiante, pero una vez dentro vives algo espectacular, porque su pasión por el fútbol está fuera de lo normal. Soy del Real Madrid y reconozco que en el Bernabéu es un placer ver un partido, porque es como ir al teatro. 

Conoce muy bien Uruguay, ¿qué rincón cree que deberíamos descubrir?
Me encantó Punta del Diablo. Es muy chulo. Tiene casitas entre dunas y mirando al mar. Me gustaba ir a Playa Grande para sortear una ola enorme. Aquí solo me encontraba con otros tres surferos y una colonia de tortugas enormes.

¿Crees que existe algún destino perfecto?
Fiji es el lugar soñado. Estuvimos una semana en Tavarua, una isla en forma de corazón, perfecta para aquellos a los que les guste el mar. Puedes pescar, bucear, surfear o realizar una excursión para observar una duna en medio del océano cuando baja la mar. Y nos sorprendieron mucho los murciélagos, ¡eran gigantes!

Practica el buceo ¿dónde ha encontrado los mejores fondos marinos?
Estuve haciendo snorkel en Poor Knights, en el norte de Nueva Zelanda. Es un archipiélago de islas vírgenes, muy escarpadas, imposibles de abordar. Se trata de una reserva donde no se puede pescar y mi mujer comentó que había realizado el mejor buceo de su vida. Desde la superficie pude ver una imagen impresionante, creo que habría 5.000 peces, nunca he visto tantos juntos en toda mi vida. Nueva Zelanda es uno de los lugares más increíbles que he conocido.