El trabajo, la familia, los amigos, los eventos sociales... tu vida es un auténtico ir y venir, ¿verdad? Apenas tienes tiempo para ti, cuidarte y mimar tu piel como realmente se merece. Aunque intentas sacar cada semana unos pocos minutos te das cuenta de que es insuficiente para eliminar los signos de cansancio y del estrés en tu rostro. ¿Qué puedes hacer para compaginarlo todo sin que tu rutina se vea mermada?

Aunque lo hayas visto en tus amigas o leído en Internet, nunca te has atrevido a probarlas. Pero las mascarillas caseras pueden convertirse en la mejor solución para aquellas que tengan una vida excesivamente ajetreada y no quieran dejar de lado el cuidado de su piel. Son muy eficaces, las puedes hacer tu misma y, además, tardarás menos de 10 minutos. Estas son algunas de las que más nos gustan:

Mascarilla de pepino y limón

Por supuesto, el pepino debe estar en un lugar destacado de nuestra lista…y de tu rutina de belleza. Hidrata la piel, aumenta la producción de colágeno, disminuye las ojeras, elimina el exceso de sebo y termina de un plumazo con las impurezas. Los beneficios de este 'superfood' para la piel son innumerables, así que no lo desaproveches y cada vez que veas un asomo de espinilla en tu rostro, o si quieres evitar que aparezcan, apuesta por él. Si además juntamos sus efectos con los del limón, otro de las frutas con más ventaja para nuestra dermis, los resultados son poco menos que espectaculares. Los cítricos ejercen una acción limpiadora y astringente para piel, por lo que también es ideal para atenuar las marcas de acné.

¿Cómo hacerla?: corta el pepino en rodajas, parte el limón a la mitad y exprime una de sus mitades para obtener su zumo. Agrega el pepino al zumo de limón y exprímelo todo en la licuadora. A continuación, lava tu rostro con agua y un jabón antiacné y, con la ayuda de una brocha, extiende la mascarilla de pepino y limón. Deja actuar unos 15 minutos y el resultado será espectacular.

Mascarilla de yogurt con miel

¿Qué todavía no conoces todas las propiedades del yogurt? ¡Vas tarde!. Es otro de los ‘superfoods’ por excelencia para la piel: exfolia la piel, la hidratada y se presenta como el gran alimento para plantar cara a los granitos. En cuanto a la miel, se trata de un agente limpiador y suavizante, que hidratará tu rostro por completo.

¿Cómo hacerla?: Coloca los dos ingredientes en un bol o recipiente, mézclalos y luego cubre tu rostro. Deja actuar unos 20 minutos y luego enjuágate con agua tibia. ¡Más fácil imposible!

Mascarilla de levadura de cerveza y clara de huevo

De buenas a primeras puede no sonar muy apetecible pero lo cierto es que tiene unas ventajas enormes para la piel. La levadura de cerveza nos ayuda a depurar las toxinas que se acumulan en la dermis y es rica en minerales como el silicio, imprescindibles para tener un cutis joven y firme. Por su parte, la clara de huevo aporta firmeza y a la vez reduce el exceso de sebo, lo que es ideal para las pieles grasas.

¿Cómo hacerla?: Tardarás menos de cinco minutos en mezclar ambos ingredientes hasta conseguir la textura adecuada. A continuación, una vez que la dejes reposar entre 110 y 15 minutos, aplícatela en la nariz, frente y pómulos. Después de ver el resultado, ¡no querrás probar otra!